Tras detención de jueza que acusa arbitrariedad, CNDH pide a Veracruz respetar derechos humanos de mujeres

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) reitera su compromiso con la máxima protección de los derechos humanos de las mujeres, en un comunicado, hace un llamado para que en el caso de la jueza Angélica Sánchez Hernández, detenida recientemente, la administración de justicia se realice con perspectiva de género y enfoque diferencial.

A continuación el comunicado:

La CNDH hace un llamado para que en el caso de la jueza Angélica Sánchez Hernández, la administración de justicia se realice con perspectiva de género y enfoque diferencial, bajo los más altos estándares nacionales e internacionales.

Respecto al caso de la jueza Angélica Sánchez Hernández, detenida presuntamente de forma ilegal el pasado 5 de junio, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) recuerda a las autoridades encargadas de la administración e impartición de justicia que es obligación del Estado mexicano prevenir, atender, investigar y sancionar la violencia contra las mujeres, con la finalidad de garantizar su derecho a una vida libre de violencia y su acceso a la justicia, con pleno respeto a sus garantías de debido proceso.

Sin el ánimo de entrar al fondo del asunto, para lo cual, esta Comisión Nacional no tiene competencia legal, se hace un llamado a las autoridades encargadas del caso de la jueza Angélica Sánchez para que se garanticen y respeten sus derechos, con los más altos estándares nacionales e internacionales en materia de derechos humanos de las mujeres.

Las mujeres a lo largo de la historia han sufrido desigualdad y discriminación, enfrentándose a situaciones de violencia, abusos y trato desigual sólo por el hecho de ser mujeres, negándoseles oportunidades igualitarias con relación a los hombres. Por ese motivo se insta a las autoridades del estado de Veracruz a garantizar el derecho a la presunción de inocencia e investigar el caso incorporando los criterios establecidos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en el “Protocolo para Juzgar con Perspectiva de Género”, el que destaca:

1) Identificar situaciones de poder por cuestiones de género entre las partes de la controversia;

2) Valorar las pruebas, desechando cualquier estereotipo o prejuicio de género a fin de advertir situaciones de desventaja;

3) Visibilizar las situaciones de desventaja, vulnerabilidad o discriminación por razones de género;

4) Cuestionar la neutralidad del derecho aplicable y evaluar el impacto diferenciado de la solución propuesta;

5) Aplicar los estándares de derechos humanos de todas las personas involucradas, y

6) Evitar la utilización de lenguaje basado en estereotipos o prejuicios, y, a su vez, procurar el uso de lenguaje incluyente.

Por lo que, en atención a los compromisos a los que se adhirió el Estado mexicano, en los que se ha obligado a eliminar la discriminación contra las mujeres en el ejercicio de su derecho de acceder a la justicia, pues el inciso C del artículo 2 de la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW, por sus siglas en inglés), obliga a los estados parte a “…establecer la protección jurídica de los derechos de la mujer sobre una base de igualdad con los del hombre y garantizar, por conducto de los tribunales nacionales competentes y de otras instituciones públicas, la protección efectiva de la mujer contra todo acto de discriminación”, se exhorta a condenar todas las formas de violencia contra la mujer; abstenerse de cualquier acción o práctica de violencia, y a que su personal e instituciones se comporten de conformidad con esta obligación, así como a modificar las prácticas jurídicas o consuetudinarias que respalden la persistencia o la tolerancia de la violencia contra la mujer.

Este organismo autónomo confía en que se realizarán las acciones necesarias para respetar, proteger, garantizar y permitir el ejercicio efectivo de los derechos de la jueza Angélica Sánchez Hernández y de todas las mujeres, a quienes se les vulneren sus derechos humanos.