“Senderos de paz”, un buen camino para bajar los índices delictivos en los Municipios de Veracruz.
Diputado Rafael Gustavo Fararoni Magaña.
La delincuencia es un fenómeno social complejo que tiene como componentes en su origen múltiples causas. Algunas de las más importantes se centran en la ruptura de las relaciones intrafamiliares e interpersonales de quien comete un delito, así como el ambiente social en el que se desenvuelve el sujeto, nivel cultural, situación laboral, factor socioeconómico, habitación y vicios entre, otros tantos factores.
De la misma manera, prevenir la delincuencia es un tema que involucra múltiples acciones, a diferentes niveles. Las principales tienen que ver con la educación, políticas de inclusión social, fortalecimiento de las comunidades mediante programas económicos que generen más empleos y mejores oportunidades de desarrollo.
Sin embargo, hay temas fundamentales que tienen que ver con la mejoría de la infraestructura de las poblaciones, para ayudar a que los índices de delincuencia bajen y un claro ejemplo de esto fue en su momento el programa “Sendero Seguro” creado e impulsado por la jefa de Gobierno de la CDMX, Clara Brugada, cuando era alcaldesa de la delegación de Iztapalapa, el cual se centraba en la iluminación de espacios y la rehabilitación de infraestructura para generar un entorno más seguro. Esto tuvo como consecuencia una mayor seguridad entre los ciudadanos que circulan a diario por esa zona, pero también generó una mayor cohesión de la comunidad y por ende una mayor voluntad de sus miembros para intervenir en la prevención de delitos, así como denunciarlos.
Expertos en el tema de la seguridad también señalan que los entornos más iluminados y sobre todo bajo programas ordenados, provocan entre los delincuentes una sensación de mayor vulnerabilidad y además fomentan la vigilancia natural, alientan la apropiación del espacio público tal y como sucedía en el pasado y promueven un mayor sentido de comunidad.
En esta misma línea, nuestra presidenta Claudia Sheinbaum anunció en días pasados un vanguardista programa denominado “Senderos de paz” que tiene como objetivo la intervención, con iluminación, infraestructura y murales urbanos en las zonas más oscuras de los municipios del país, todo esto como herramientas necesarias para generar entornos más proclives a evitar la comisión de delitos, es decir combatir las causas, lo cual ha sido desde el inicio la base de las acciones impulsadas en la cuarta transformación.
El anuncio de este importante programa “senderos de paz” lo hizo nuestra presidenta en el marco de una reunión de trabajo con su gabinete de seguridad, en donde hizo un atento llamado a los Gobernadores y Gobernadoras, para que trabajen en coordinación a favor de la seguridad del país.
En lo personal, en el municipio de San Andres Tuxtla que me honró en representar en la presente legislatura de nuestro Estado, hemos venido haciendo un trabajo intenso en este sentido y desde el pasado mes de octubre comenzamos a implementar el programa “Faraluz”, mediante el cual hemos instalado casi 200 lámparas solares, 100 lámparas en las colonias Belén Grande, Buena Vista, Emiliano Zapata, Esperanza y Ferrocarril, así como 75 en comunidades como Sihuapan, Calería, Tepancan y Comoapan.
Desde el Distrito 25 vamos de la mano con nuestra presidenta para apoyar esta y más iniciativas en favor de la sociedad que reclama a diario y de manera honesta, mejores condiciones de vida. Esto lo hacemos también conscientes de la importancia que tiene San Andrés Tuxtla para el estado de Veracruz y en coordinación permanente con nuestra gobernadora Rocío Nahle, en su misión de mejorar la infraestructura del estado para volver a proyectar el turismo a niveles trascendentes que generen derrama económica entre la población y sobre todo generen confianza para las inversiones en nuestro distrito.
Así mismo, seguiremos impulsando acciones que ayuden a generar más empleos, promuevan la cultura, la práctica de deportes, sobre todo entre la juventud y dando seguimiento a acciones que promuevan la salud, la educación y el bienestar de San Andrés Tuxtla y de Veracruz. Todo esto bajo la premisa de que, con mayor seguridad y bienestar, las comunidades tienen un crecimiento sostenido y esto provoca un decremento natural de la delincuencia, de la mano con la ciudadanía.